Publicada: 03-04-2021
Categoria: Cultura
Como epílogo de esta Semana Santa diferente, a la espera de la veneración a la virgen de Las Alegrías este Domingo de Resurrección, el alcalde de la ciudad, Rubén Rodríguez, y otros representantes de la Corporación, asistieron este Viernes Santo al acto de ‘Las Sietes Palabras’ organizado por la Hermandad del Santo Entierro en la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol.
El alcalde estuvo acompañado, además de por el jefe de la Policía Local, José Miguel Moreno, por la teniente de alcalde, Lidia Infante y por la concejala de Participación, Mercedes Rosado. El portavoz de PP, Adrián Moreno, también estuvo presente en representación de su grupo. Además, y como sucede en el cortejo del Viernes Santos, estuvieron el presidente del Consejo de hermandades y cofradías y representantes de todas las congregaciones de Penitencia de la ciudad. El aforo estaba limitado, se cumplieron todas las normas sanitarias y contó con la colaboración de miembros de la Agrupación de Protección Civil.
La hermandad este año ha sustituido la Estación de penitencia por el acto litúrgico de “Las Siete Palabras”, que habitualmente celebran el sábado anterior al Domingo de Ramos, y en la que se medita y exalta las últimas siete frases que la Biblia recoge de Jesucristo antes de su muerte. Con este fin, un grupo de seis hermanos trasladó en parihuela la imagen del Cristo de la Buena Muerte desde el altar de veneración hasta los pies del altar mayor, donde el párroco, Cristóbal Robledo, desarrolló la meditación y exaltación.
Cada uno de los siete pasajes estuvo acompañado por la música del cuarteto local de cámara ‘Schubert’ y las voces de un barítono y una soprano. Tampoco faltó la tradicional saeta, a la que puso voz, a los pies del altar de veneración, la saetera bollullera María Esquivel. Para este domingo, la hermandad instalará un nuevo altar extraordinario para la virgen de Las Alegrías, que presidirá este año la Misa de Resurrección.
El alcalde ha destacado la buena organización y el cumplimiento de las normas tanto de éste como del resto de actos que se han llevado a cabo esta Semana Santa y que demuestran los sólidos cimientos que tienen las hermandades en la sociedad bollullera.