Ayer, domingo de Pasión, Bollullos escribió una nueva página en la historia de los pregones cuaresmales. La Parroquia de Santiago Apóstol acogió el pregón de Javier Jiménez Rodríguez, un pregón que estuvo aplazado en el tiempo hasta en dos ocasiones por culpa de la dichosa Pandemia. 

La música en el acto corrió a cargo de la Banda Virgen de las Mercedes de nuestra localidad, que interpretó Amargura, Soleá dame la mano y Nª Sª de las Mercedes, además del Himno Nacional para finalizar.

Antonio Jesús Martín Ramos, fue el encargado de presentar al pregonero, para el que tuvo palabras de aliento, emotivas también por el parentesco que les une, ensalzando la figura de un hombre de las Madrugá, de una pluma exquisita, que supo plasmar con su rica oratoria sus sentimientos e inquietudes con respecto a la Semana Santa que siempre ha vivido.

El alcalde de la ciudad, Rubén Rodríguez, junto a otros miembros del Equipo de Gobierno, y concejales de la Corporación Municipal, estuvo presente en este importante acto, preludio de nuestra Semana Santa, invitados por el Consejo de Hermandades y Cofradías de la localidad.

Como es habitual en este tipo de pregones, Javier Jiménez hizo un recorrido por las distintas hermandades de nuestra Semana Mayor a través de sus vivencias en las diferentes etapas en las que las ha vivido, niñez, adolescencia, madurez… dejando anécdotas que hicieron sonreír en mas de una ocasión a los presentes, tocando la fibra sensible y emotiva de todos aquellos que le conocen y también a los que no, pero ahondando asimismo en la pública catequesis que representa una cofradía en la calle.

Javier Jiménez Rodríguez, ofreció un Pregón con mayúsculas, reivindicativo y crítico por momentos, pero ungido en la fe a Cristo y su Madre. Un Pregón de gran calidad, excelente poesía llena de figuras literarias y momentos entrañables, cuando habló, sobre todo de su hermandad, recordando a tantos y tantos cofrades ya desaparecidos. Un discurso rotundo y auténtico que no dejó indiferente a nadie.

El Pregón de la Semana Santa es cada año el pórtico de nuestra Semana Mayor y Javier Jiménez encendió ayer los primeros cirios que alumbrarán el camino hasta el Domingo de Ramos.